
Ernesto Zazueta, presidente de la Asosciación de Zoológicos, Criaderos y Acuarios de México (Azcarm), manifestó su preocupación, ya que el Gobierno colombiano no ha autorizado los permisos necesarios para trasladar a 70 hipopótamos- descendientes de ejemplares comprados por un jefe del crimen organizado colombiano- a santuarios de la India y México, por lo que vaticina que las autoridades del país sudamericano optarán por sacrificar 160 ejemplares que habitan el Río Magdalena.
Zazueta indicó que, tanto Ostok Sanctuary, que él preside, como Greens Zoological Rescue and Rehabilitation Center de la India, han hecho los trámites necesarios y las adecuaciones necesarias de espacios para trasladar y recibir a 70 hipopótamos; pero el gobierno colombiano no ha aprobado aún el permiso CITES, el único requisito faltante para llevar a cabo la translocación.
El presidente de la Azcarm recalcó que temen que el retraso se deba a que las autoridades colombianas estén contemplando la opción de sacrificar a los hipopótamos, tal como lo plantea un estudio realizado -a petición del Ministerio de Ambiente de Colombia- por 28 investigadores del Instituto Humboldt y por el Instituto de Ciencias Naturales ICN de la Universidad Nacional.
“Estamos sumamente preocupados, porque por parte del Centro de Rescate en la India y aquí en Ostok ya estamos listos para recibir a 60 y a 10 hipopótamos respectivamente de los casi 200 que se encuentran libres en la Cuenca del Río Magdalena y cuyos ascendientes pertenecieron a Pablo Escobar, pero el gobierno colombiano tiene frenada dicha translocación de los ejemplares.
«Y tememos que esto se deba a que están contemplado la caza física o química de los animales, que a decir del estudio del Instituto Humboldt es la técnica de control más corta, es decir, la más rápida para erradicar a esta especie que se ha catalogado como invasora”.
Zazueta admitió que el sacrificio es la forma más rápida para “acabar” con el problema, sin embargo, cuestionó por qué acabar con la vida de tantos animales silvestres cuando existen centros de rescate dispuestos a darles una segunda oportunidad de vida.
“Me queda claro que las translocación es una alternativa que lleva más tiempo y es mucho más costosa, pero la vida silvestre en el mundo entero se está extinguiendo y los humanos tenemos que hacer todo lo que esté en nuestras manos por frenar esta extinción, y eso incluye salvar a la mayor cantidad de animales silvestres en riesgo, como lo son estos hipopótamos que en Colombia se están reproduciendo aceleradamente, pero que, de acuerdo a la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza, se encuentran en peligro de extinción en su zona natural de distribución, y precisamente principalmente por la caza furtiva”, finalizó Ernesto Zazueta.