
La Corte Suprema de Estados Unidos anuló este jueves las restricciones impuestas al acceso a una píldora abortiva, la mifepristona, pero el presidente Joe Biden advirtió que «la lucha» por los derechos reproductivos continúa.
En su fallo unánime, los nueve jueces del tribunal, de mayoría conservadora, afirman que los médicos y los grupos antiabortistas que impugnaban el medicamento carecían de legitimación para presentar el caso.
Por consiguiente anulan un fallo en apelación, que de todos modos ya habían suspendido.
El predecesor y rival de Biden en las elecciones de noviembre, Donald Trump, lidera el Partido Republicano, ampliamente favorable a las restricciones del acceso al aborto.
Biden y los grupos antiabortistas reaccionaron con cautela al dictamen de la Corte Suprema, de mayoría conservadora, que dejó la puerta abierta a combatir la mifepristona en otros foros.
«La decisión de hoy no cambia el hecho de que la lucha por la libertad reproductiva continúa», afirmó Biden en un comunicado.
«Los ataques al aborto con medicamentos forman parte de la agenda extrema y peligrosa» de los republicanos «para prohibir el aborto en todo el país», añade.
Nancy Northup, presidenta del Centro de Derechos Reproductivos, expresó «alivio y rabia» por la decisión.