
Corea del Norte anunció el domingo que probó un sistema de misiles de crucero, su tercer ensayo armamentístico conocido este año, y prometió “la respuesta más dura” a lo que describió como una escalada de ejercicios militares de Estados Unidos y Corea del Sur que apuntan al Norte.
Los movimientos sugieren que Corea del Norte probablemente mantendrá su serie de pruebas de armas y su postura confrontacional contra Estados Unidos por ahora, aunque el presidente Donald Trump dijo que tiene la intención de comunicarse con el líder norcoreano, Kim Jong Un.
La Agencia Central de Noticias de Corea (KCNA) informó que Kim observó el sábado la prueba de armas estratégicas guiadas de mar a superficie.
El término “estratégico” implica que los misiles son capaces de portar armas nucleares. KCNA indicó que los misiles de crucero alcanzaron sus objetivos después de recorrer patrones de vuelo elípticos y en forma de ocho de 1.500 kilómetros (932 millas) de longitud, pero eso no pudo ser verificado de manera independiente.
En declaraciones citadas por KCNA, Kim dijo que las capacidades de disuasión de guerra de Corea del Norte “se están perfeccionando más a fondo” y afirmó que su país hará “esfuerzos enérgicos” para defender la estabilidad “sobre la base de un músculo militar más poderosamente desarrollado”.
El Estado Mayor Conjunto de Corea del Sur dijo que Corea del Norte lanzó “varios” misiles de crucero hacia sus aguas occidentales desde una zona interior alrededor de las 4 de la tarde del sábado. Indicó que Seúl sigue dispuesta a “repeler de forma abrumadora” cualquier provocación norcoreana en conjunto con su alianza militar con Estados Unidos.
En un comunicado separado emitido por KCNA el domingo, el Ministerio de Relaciones Exteriores de Corea del Norte criticó a Estados Unidos por realizar “provocaciones militares graves que apuntan a” Corea del Norte con una serie de maniobras militares con fuerzas surcoreanas este mes.