
La tarde del martes 8 de abril, tras un fuerte debate entre los senadores Javier Corral Jurado (Morena) y Mario Vázquez Robles (PAN), la Cámara de Senadores rechazó el listado que contenía a los posibles magistrados electorales de 30 de los 32 estados del país. Tal acto generó controversia entre los diputados de Chihuahua, pues en el grupo de tribunales electorales a renovar cargos, se incluía al de la entidad.
Elizabeth Guzmán Argueta (Morena), presidenta del Congreso del Estado, advirtió que desde la legislatura pasada, el Tribunal Estatal Electoral no ha tenido una resolución satisfactoria en cuanto a los aspirantes a ser magistrados electorales, hecho que evidenciaba una falta de consenso entre las fuerzas políticas del Senado.
Por su parte, Guillermo Ramírez (PRI) criticó la politización del tema por parte de las dos bancadas opositoras (Morena y PAN, respectivamente) ya que se trata de una elección relevante para la justicia electoral de Chihuahua, pues serán estos magistrados quienes atiendan las quejas de la ciudadanía en materia de violación de derechos políticos-electorales, tal y como lo han realizado los actuales integrantes del TEE.
“Deberíamos tener a los mejores perfiles, los más preparados e imparciales, a quienes tengan la vocación de servicio y los que puedan enfrentar los grandes retos que tiene Chihuahua en materia electoral”, advirtió.
Esta necesidad, dijo, incrementa con la cercanía de las elecciones al Poder Judicial del Estado y de la Federación, pues serán los magistrados electorales quienes realicen el cómputo de los votos, elijan a los finalistas y sobre todo, quienes atiendan las controversias que existan durante el sufragio nacional y estatal.
Ambos legisladores coincidieron en que si bien, es tarea del Senado de la República designar a los próximos ocupantes del TEE, la decisión debe ser tomada dejando de lado el partidismo, las diferencias entre los legisladores y enfocándose solo en la aptitud y experiencia de los perfiles.