
La serie de ataques perpetrados desde el territorio yemení en los últimos días ha dado lugar a una escalada que presenta una amenaza crítica para el comercio mundial en las vitales rutas del Mar Rojo y el Mar Arábigo.
Los hutíes yemeníes atacan con misiles y drones cualquier barco vinculado a Israel que navegue cerca de sus costas. Han generado una situación de extrema gravedad que impacta en la seguridad y estabilidad de las aguas internacionales.
La Marina británica, en una jornada marcada por la máxima alerta del año, emitió tres advertencias este viernes, revelando la magnitud de los incidentes. Uno de los sucesos más preocupantes fue el impacto de un «objeto desconocido» en un buque, provocando un incendio a bordo a unas 60 millas al suroeste de Al Hudeida, uno de los principales puertos yemeníes en el Mar Rojo.
Otro atentado, ya catalogado como «ataque» por la Marina británica, implicó una «explosión a bordo que provocó un incendio, ahora extinguido» en otro buque cerca de Bab al Mandeb, a 30 millas al suroeste del puerto de Mokha, en Yemen.
Afortunadamente, la tripulación y el buque resultaron ilesos, según los informes. Los hutíes han asumido la responsabilidad de estos dos últimos ataques, declarando que sus fuerzas navales llevaron a cabo una operación militar contra dos buques portacontenedores (MSC Alanya y MSC PALATIUM III), ambos con bandera de Liberia, que «se dirigían» hacia Israel.