Ozuna sacude la explanada del Estadio Azteca

Un cielo nublado amenazaba con soltar una fuerte lluvia, pero no impidió que cientos de fans de Ozuna desfilaran por los alrededores del estadio, desde los puestos de micheladas que se encontraban atiborrados, hasta las paqueterías improvisadas, fueron los lugares más frecuentados para aminorar la espera.

A punto de las 21:00 horas, las personas empezaron a ingresar, los largos filtros se hacían notar, algunos eran regresados por llevar artículos no permitidos como cinturones o cables para cargar su celular, la espera se empezaba a volver larga, los gritos como “¡es para hoy!”, “Ya no voy a alcanzar el metro” y además los chiflidos sonaban por toda la explanada del Estadio Azteca.

El reloj marcaba las 22:05 horas, un violinista vestido con un traje de mariachi apareció en el escenario, que estaba adornado con piedras. Los gritos sacudieron la explanada, y el tema “Qué pena” empezó a sonar, provocando que todos los celulares apuntaran hacia el escenario, le siguió “Del mar”, canción que interpreta junto a Doja Cat y Sia, mientras que fuegos artificiales fueron lanzados iluminando el cielo del sur de la capital.

El Coloso de Santa Úrsula fue testigo de uno de los temas más virales del caribeño “Monotonía”, tema que comparte con Shakira, esto provocó una ola de euforia entre los asistentes. Quienes con gritos y brincos recibieron el tema, poniendo a bailar a todos en el lugar, mientras que algunos que habían tomado un momento para ir al baño corrieron desde el fondo para acercarse para no perder ni un momento del tema.

El siguiente tema fue “Caramelo”, que pareció ser uno de los favoritos del público, pues fue coreado con sentimiento y entusiasmo. El cantante derrochó un gran dominio sobre el escenario, ganando una lluvia de aplausos y ovaciones del público, a lo que les respondió “Buenas noches, México. Un beso para todas esas mujeres hermosas que se dieron cita aquí”.

Baila baila baila”, “Despeinada”, canción con Camilo, “Ibiza”, “Yo x ti, tú x mí”, con Rosalía. Fueron temas que continuaron resonando durante la noche, mientras el público se encontraba bailando y disfrutando. Cada que el artista se tomaba un descanso para hidratarse recibía el apoyo y aliento de sus fans. Los temas no paraban de sonar y la gente no dejó de corearlos durante toda la noche.