
Selma Cervantes es una de las voces femeninas en el cine mexicano que ha irrumpido con una fuerza y energía que hace imposible no voltear a sus trabajos y seguir sus trabajos de cerca, ahora tras ser nominada al premio de la Academia Mexicana de Artes y Ciencias Cinematográficas, Ariel, a Mejor Cortometraje por Manchester Acatitla (2021) regresa a la misma categoría por Chica de fábrica, un doloroso trabajo sobre la explotación laboral en un mundo que castiga el embarazo.
Con motivo de esta nueva nominación al Ariel, en Crónica Escenario charlamos con ella.
Segundo corto, segunda nominación.
Sí, ¿verdad? Eso es impresionante, no lo puedo creer.
Una chica de fábrica humilde, una chica de fábrica que sufre el desprecio y el acoso laboral, que ahora está dando la vuelta al mundo y que está siendo reconocido por una nominación de Ariel. ¿Cómo estás abrazando tú ahorita a esta Chica de fábrica?
Pues Chica de fábrica la verdad es que empezó siendo un corto muy independiente y la realidad es que las expectativas fueron creciendo, tener a Yalitza [Aparicio] y a todo el cast incrementó nuestras posibilidades de estrenar en un buen festival y ahora pues estar en el Ariel. Le debo todo a las personas que confiaron mucho en nosotras.