Las esperanzas de encontrar más sobrevivientes en el fatal derrumbe del techo de un club nocturno en República Dominicana comenzaron a desvanecerse el miércoles cuando las autoridades reconocieron que no habían encontrado a nadie con vida entre los escombros desde el martes por la tarde.
El techo de Jet Set, un popular club de baile en Santo Domingo, se derrumbó la madrugada del martes durante un concierto de merengue en vivo, matando al menos a 124 personas, dijo Juan Manuel Méndez, director del Centro de Operaciones de Emergencia de la República Dominicana, el miércoles temprano.
Las autoridades utilizaron maquinaria pesada, perros, drones y otros equipos especiales para examinar los escombros con el fin de encontrar sobrevivientes y recuperar los cuerpos, mientras las familias se reunían afuera para recibir noticias de sus seres queridos. Con cada actualización de noticias, el recuento de cadáveres aumentaba.
«Tenemos el mismo número de traslados al hospital que a las 3 p.m. de ayer: 155», dijo Méndez, subrayando que las ambulancias a menudo llevaban a más de una persona.
No estaba claro cuántas personas seguían desaparecidas. No ha habido ningún anuncio oficial de cuántas personas estaban dentro del club en el momento del colapso del techo.
Méndez había prometido continuar la búsqueda hasta que se recuperara a la última persona. Una operación a gran escala estaba en marcha por segundo día, con cientos de rescatistas de varias agencias en el sitio del club nocturno.
El director de la Policía Nacional, Ramón Guzmán Peralta, dijo el miércoles que varios muros de la instalación habían sido removidos estratégicamente para permitir un mejor acceso a la zona del desastre, facilitar la remoción de escombros y acelerar la búsqueda.
Méndez confirmó la muerte de Rubby Pérez, la artista que se presentaba cuando el techo se derrumbó alrededor de las 12:45 a.m. Su cuerpo fue recuperado la madrugada del miércoles, dijo el funcionario.
Grupo Popular, una de las empresas bancarias más importantes de República Dominicana, anunció que su presidente, Eduardo Grullón; su esposa, Jhonna Rodríguez de Grullón; su hermana, Alexandra Grullón, también banquera; y su esposo, Eduardo Guarionex Estrella Cruz, hijo del ministro de Obras Públicas del país, habían muerto en el desastre. Una empleada, Stephanie Avendaño Patricio, también falleció.
También falleció la gobernadora de la provincia de Monte Cristi, Nelsy Cruz. Al principio, Cruz quedó atrapada entre los escombros y pudo llamar al presidente de la nación, Luis Abinader, desde los escombros.
Dos ex jugadores de béisbol profesional, Octavio Dotel, ex jugador de los Yankees y los Mets, y Tony Blanco, quien jugó para los Nacionales de Washington, también murieron.
El mandatario dominicano declaró tres días de luto nacional.
El desastre en el Jet Set fue un golpe devastador en la República Dominicana, donde durante décadas la gente se había reunido en el popular club, particularmente los lunes por la noche. Artistas, atletas y políticos frecuentaban el club, y esa lista de invitados con nombres llamativos se reflejó en el número de muertos.
Videos que circulan en las redes sociales y verificados por The New York Times relatan el desastre. Los videos mostraban a Pérez actuando ante un grupo de juerguistas cuando la cámara comenzó a temblar y la gente comenzó a gritar mientras un gran candelabro caía del techo.
Otro video, filmado después y también verificado por The Times, capturó la extensa destrucción, mostrando que casi todo el techo se había derrumbado, con escombros cubriendo el escenario y la pista de baile mientras los rescatistas buscaban los restos.
Las autoridades dijeron que era demasiado pronto para determinar la causa del desastre.
